18/10/08

Silencio...

17/10/08

El bache de mi calle

En la calle donde vivo, justo enfrente de mi casa, hay un hundimiento de cerca de un metro cuadrado en el pavimento. Los vecinos se organizaron para gestionar la reparación ante Caasim, donde ningún miembro de mi familia participó por considerarlo poco importante. Resulta que es causado por una fuga en la conexión a mi casa. La culpa, en pocas palabras, es de nosotros. La dependencia municipal solventa los trabajos, aunque nos corresponde pagar el nuevo tubo.

16/10/08

Sin ganas de escribir hoy...

14/10/08

San Antonio Newspaper

Pues resulta que nos aceptaron, vamos a escribir para este periódico bilingüe. No hay pago como yo esperaba, pero al menos nos dejarán mandar lo que se nos ocurra.
"Hola, chamacos,
Chéquenlo y me dicen qué pex. Nos ponemos de acuerdo para enviar todo lo necesario y al mismo tiempo.
Saludos.

Griselda"

13/10/08

Diez minutos para leer

Elegí Desde el balcón. Comencé la lectura a pesar de que mi garganta se resistía; pude con un par de párrafos hasta que se cerró, bebí un poco de jugo y continué; mi garganta era más necia y volvió a cerrarse. Haré un tercer intento, dije, y pude leer más fluidamente hasta terminar.
"Resulta que manejando de pronto recordé con mayor exactitud las palabras de aquella señora, ella dijo: 'ese cuento es realmente bueno, qué hermoso, qué poético' mientras la otra señora asentía con la cabeza..."

12/10/08

II Encuentro Latinoamericano de Escritores Tulancingo 2008

Cuando llegamos a la plaza había dos eventos: una lectura de poemas en un extremo, un espectáculo con dos payasos en el otro. Era viernes por la tarde, no sé cómo estuvieron los días anteriores, pero cuando yo llegué, y lamento decirlo, el par de sujetos maquillados tenía más público que los cuatro poetas en la mesa; el entretenimiento era sin duda mayor en donde no había sillas, ni libros, ni versos de no sé cuántas sílabas.

10/10/08

Réplica

"Juan Cuervo dice:
señor
Juan Cuervo dice:
no entristezca
Juan Cuervo dice:
me tiene consternado la entrada en su blog
Juan Cuervo dice:
me hace sentir como un infame."

No es que me desanime. Agregué el comentario de la entrada anterior para tener presente que en esto de querer o pretender ser escritor uno se puede topar con gente que le dice la verdad. Lo hago para recordar que ya no estoy en mi pueblo, donde los comentarios de mis textos llegan a ser: "está bonito", "qué padre escribes", "me gustó".
Agradezco el interés del señor Juan Cuervo (alias Rafael Tiburcio García), por ahora única persona que deja sus post en este neonato espacio de expresión.

¿Mal día en el taller literario?

Anotaciones en mis textos:

"¿Qué pachó?
...
¿O son dos microficciones?
No, señor, no haga esto.
Romano no debería hacer poemínimos... ni usted microficciones..."

(...)
"La minificción es acorde con estos tiempos de lectura en web, se presta para leer rápido en una compu, pero no en las páginas de un libro de papel."

8/10/08

Poco a poco voy descuidando este espacio. Me pregunto si alguien lo lee. ¿Está aquí para que alguien lo lea?

4/10/08

Casa para vivir

70-00998 Frente a primaria Vicente Guerrero. 71-35734 Esquina, arriba de pastes Krystal. 71-81172 Surtidora.

Renta departamento grande o chico. Informes: Rafael Lucio #503.

(Ver casas cerca de Abasolo.)
Tocar timbre.
Tocar fuerte. Sin niños.

3/10/08

Partidario de la locura

Ayer hablábamos de la tan poco valorada locura, término que se ha usado en demasía, lo que le ha quitado su valor real. Mi frase fue: “Es como dice la canción, el mundo está lleno de locos”. La respuesta que me dieron fue que yo no debía subestimar así la locura.
No la subestimo, contesté. Yo soy partidario de la locura. Nadie sabe cuánto aprecio la demencia, algunos conocen mi intención de hallar “la sensatez del desvarío”, mi esfuerzo por darle la razón a los que la han perdido.

2/10/08

Caminata a las 3am

No hacía tanto frío; no como en la tarde. Salí de su casa. Ella se quedó con su dolor de cabeza y sus tremendas ganas de dormir.
Cuánta paz sentí al caminar por la calle, cuánta tranquilidad. Estar a solas me permitió decirme a mí mismo que realmente la quiero. Pensé en que nunca antes había sentido tales ganas de que algo durara.
Pedí (pido) que no me falte. Es ella, me dije.
Es ella.